Sin embargo, es capaz de transmitir agentes etiológicos, lo que desencadena la aparición de una enfermedad en humanos y animales, refiere investigador de la Universidad de Yucatán.
El investigador Julián García Rejón, del laboratorio de Arbovirología del Centro de Investigaciones Regionales “Dr. Hideyo Noguchi” de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), descartó que el mosquito del manglar (Aedes taeniorhynchu) pueda transmitir dengue, chikungunya y zika, sin embargo, se considera que es capaz de transmitir agentes etiológicos, es decir, algún virus, bacteria o sustancia presentes en el medio ambiente que desencadene la aparición de una enfermedad, tanto en humanos como en animales.
Por ejemplo, el Charon evagatus, un flavivirus del grupo del Arbovirus que provoca fiebre de grado variable, piel y mucosas de color amarillo, y hemorragia en ocasiones intensa; el virus de la encefalomielitis infecciosa equina del tipo oeste, también puede ser transmitido por mosquitos y causada por agentes del género Alphavirus, que puede generar fiebre, debilidad, depresión y anorexia; así como Dirofilaria immitis, un parasito del perro, que es su hospedador definitivo, pero puede infectar a gatos, ganado, zorros, coyotes, hurones, leones marinos y, en raras ocasiones, al hombre, en quienes forma una lesión en el pulmón que puede producir trombosis, explicó Julián García.
Por tal motivo, en el centro de investigaciones se llevan a cabo estudios epidemiológicos, del vector y del virus, con el fin de identificar los tipos de moscos, los principales criaderos, conocer su comportamiento, y reportar a las autoridades los resultados de las investigaciones referentes al virus o patógenos de los mosquitos del manglar.
En tanto, se encuentran realizando análisis y monitoreo de este insecto, del cual explicó que que su hábitat son las reservas naturales de agua y los manglares de las costas, como: Baja California Norte y Sur, Campeche, Chiapas, Colima, Coahuila, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
Sin embargo, el estímulo para la eclosión de este mosco son la lluvia y las inundaciones de los lugares donde habitan, y aunque puede registrarse algún brote de huevos en cualquier época del año, la temporada de lluvias es su periodo de mayor actividad; de ahí que su aparición en diversas zonas urbanas de Mérida se deba a las recientes lluvias y a las corrientes de aire que favorecen su traslado, refirió el investigador.
Entre otras características, informó que el periodo de incubación del mosquito del manglar es de tres a siete días, atacan tanto de día como de noche. Las hembras adultas infectan al humano, se alimentan en grupos y sus picaduras provocan dolorosas ronchas; mientras que los ejemplares adultos descansan en la vegetación durante el día, atacan a cualquiera que invada sus guaridas y tienen la facilidad de avanzar muchos kilómetros lejos de su hábitat natural.
Por otra parte, tiene una alta densidad poblacional y debido a que es muy difícil de controlar por la forma en que se reproduce, las medidas que se han tomado para controlarlo, principalmente en zonas turísticas, es el uso del abate al 2%, el cual se riega en los manglares y lugares que favorecen su cría; también se colocan trampas lumínicas de corriente, mallas milimétricas y tratamiento químico para el control del mosquito adulto.
Asimismo, subrayó algunas recomendaciones para evitar su picadura, como: usar repelente certificado, instalar miriñaques, así como usar manga larga, pantalón y zapatos cerrados en áreas donde predominen los moscos.
Asimismo, subrayó algunas recomendaciones para evitar su picadura, como: usar repelente certificado, instalar miriñaques, así como usar manga larga, pantalón y zapatos cerrados en áreas donde predominen los moscos.
Fuente: Universidad de Yucatán
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