A través de la firma de un convenio, la compañía telefónica enviará mensajes de texto a quienes se encuentren en alguno de los lugares donde se prevea algún fenómeno hidrometeorológico.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la empresa telefónica AT&T firmaron un convenio de colaboración, para que a través de la emisión de mensajes de texto se les de aviso a los usuarios de manera oportuna sobre la ocurrencia y estatus de fenómenos hidrometeorológicos y condiciones extremas del clima que representen un riesgo, dentro de una zona determinada del territorio nacional.
“Es importante el poder desarrollar sistemas de alerta temprana que sean eficaces y que les permita a las personas en zonas de riego el poder tomar previsiones para que solamente podamos lamentar pérdidas materiales y no vidas humanas”, manifestó el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Por su parte, el director general de la Conagua, Roberto Ramírez de la Parra, explico que con esta colaboración se podrá llegar a aproximadamente 11.4 millones de habitantes que son usuarios de esta compañía de telefonía celular, lo que permitirá disminuir riesgos, tomar las acciones preventivas y ver hacia dónde tiene que acudir la población con el Sistema Nacional de Protección Civil para salvaguardar su vida y su integridad.
La directora ejecutiva de Asuntos Externos de AT&T, Cristina Ruiz de Velasco, detalló que “en colaboración con la Conagua, haremos llegar información sobre la trayectoria prevista de cualquier fenómeno hidrometeorológico en el territorio mexicano. Los mensajes vendrán directamente del Servicio Meteorológico Nacional y serán enviados con la mayor precisión posible a los usuarios de AT&T que viven o frecuentan la zona de riesgo”.
Respecto a los riesgos hidrometeorológicos, el coordinador general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Alberto Hernández Unzón, dijo que estos se desarrollan rápidamente, y entre ellos se encuentran: sistemas de tormentas, tornados, granizo de grandes proporciones, vientos huracanados, y crecidas repentinas, por lo que se dispone de poco tiempo para actuar.
Explicó que en los riegos de rápido desarrollo es importante centrarse en los diversos escenarios posibles de tiempo severo, se aumenta la frecuencia de vigilancia y se determinan si esas condiciones se van a materializar.
En tanto, para riesgos de desarrollos más lentos como los huracanes, que permiten hacer una detección oportuna, se cuenta “con un sistema de vigilancia rutinaria de tiempo para conocerse las probables evoluciones, tanto de la trayectoria como de la intensidad del fenómeno”, a través de una red de radares meteorológicos y satélites.
Todo lo anterior, se analiza con el fin de que las decisiones del aviso se tomen con suficiente antelación para que, quienes corren peligro puedan prepararse teniendo en cuenta la intensidad y el riesgo de desarrollo.
“Los mensajes de aviso deben contener detalles concretos sobre la magnitud del tiempo peligroso, tanto de la velocidad del viento, el tamaño del granizo, la cantidad de precipitación”; también hay que seguir la evolución de la amenaza de tiempo severo y enviar información complementaria a intervalos frecuentes, agregó.
Fuente: Conagua
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